Autocuidado físico en verano
Agua, agua, y más agua
Protector solar
Autocuidado mental
El descanso de verano
Lectura veraniega
Cuando pienso en verano, imagino el sol, la playa, la piscina y un buen libro. Comenzar una lectura en verano puede ser una escapatoria maravillosa y exactamente lo que necesitas para cuidar tu mente. Elige un libro que te inspire, te eduque o simplemente te haga sentir bien. Ve a un parque, siéntate a la orilla de la playa, o simplemente en una esquina acogedora de tu casa, y asegúrate de dedicar un tiempo cada día para desconectarte del mundo digital y conectar con tu imaginación.
Autocuidado emocional
Diario de gratitud
Tiempo de calidad
Este verano, tómate un tiempo para ti misma. Puede ser un viaje a la playa, una noche de cine en casa o simplemente sentarte en el parque leyendo un buen libro. Lo que cuenta es que disfrutes de esos momentos de calidad a solas. Pasar tiempo contigo es una manera importante de cuidarte y nutrir tu amor propio. Si quieres más ideas para pasar tiempo de calidad en verano, chequea el blog 4 citas contigo para este verano
Recuerda que cada pequeña acción que realizas para cuidarte es un paso más para nutrir la relación que tienes contigo. El autocuidado no se trata de lograr una versión perfecta de ti, sino de sentirte mejor cada día.
Este verano, hazte una promesa: sé amable contigo, comienza a cuidarte y nutre tu bienestar cómo lo mereces.